Algunos buscan intimidad, estar en silencio y cambiar pocas palabras solo con quien los va a atender, eso que solo se consigue al estar con un amigo. Otros por el contrario aprovechan para socializar mientras los rasuran. Cada barbería tiene un tipo de clientela y un vínculo peluquero-cliente que es importante ir conociendo para saber con cual quedarse.
Los barberos y los peluqueros utilizan un vocabulario específico de su profesión. Aprender este vocabulario puede ayudar a cualquier hombre a conseguir siempre el peinado que desee, niveles, nombres de cortes, etc.
Es crucial entender que lo que uno vio en una publicidad o en una película no siempre va bien con nuestro rostro, nuestras necesidades o nuestro estilo. Consultar al profesional que nos va a atender su opinión sobre lo que deseamos puede ahorrarnos un disgusto y a su vez ayudarnos a establecer un buen vínculo con él.